Eduardo Aranda, egresado de Farmacia y Bioinformática, investiga el papel del sistema inmune en el cáncer en el Instituto de Investigación Sanitaria de Aragón gracias a una beca de la Asociación Española Contra el Cáncer
Eduardo Aranda, antiguo alumno de Farmacia y Bioinformática de la USJ, ha conseguido una beca de la Asociación Española Contra el Cáncer que le va a permitir investigar durante tres años el papel del sistema inmune en el cáncer, en concreto en la metástasis, en el Instituto de Investigación Sanitaria de Aragón (IIS Aragón) dentro del grupo de investigación “Cancer Heterogeneity and Immunomics”.
Eduardo siempre había tenido claro que quería estudiar farmacia, por lo que comenzó el grado en la USJ. Sin embargo, la implantación del grado en Bioinformática cuando estaba en primer curso dio un giro a su carrera. “Vi las asignaturas, las salidas que tenía y me pareció interesante la combinación, así que estudié ambas titulaciones”, explica.
Mientras estudiaba, durante dos veranos, trabajó en una farmacia para conocer de primera mano el mundo laboral y, aunque le gustó, también quiso probar la investigación, así que, para entrar al IIS Aragón, solicitó una beca predoctoral a la Asociación Española contra el Cáncer que le fue otorgada tras proponerles su línea de investigación doctoral.
“Trato de entender cómo las células metastásicas consiguen burlar el sistema inmune para intentar así abordar nuevas opciones terapéuticas basadas en la inmunoterapia”, detalla Eduardo sobre su área de investigación.
Así pues, en el grupo de investigación, trabajan de manera conjunta profesionales como biólogos o biotecnólogos que se han ido especializando en bioinformática. “En concreto, yo me encargo de analizar los datos extraídos por las personas cuya función principal es estar en el laboratorio”, explica.
Para ello, la bioinformática es fundamental, pero los conocimientos de farmacia también son muy importantes, “sobre todo a la hora de entender el sistema inmune, lo que se realiza en laboratorio y cómo investigarlo, etc.”, argumenta Eduardo.
Para él, estudiar ambos grados fue una decisión acertada y una opción que recomienda. “Por un año adicional y un par de asignaturas más cada curso tienes dos titulaciones muy potentes en la rama de la investigación”, asegura.